Los espacios de estos elegantes apartamentos representan un equilibrio perfecto entre pasado y presente, donde los antiguos techos pintados a mano se entrelazan con suelos de mármol cuyas delicadas vetas evocan las maravillas de la naturaleza.
Estos prestigiosos apartamentos, de aproximadamente 50 m², son joyas íntimas y acogedoras, en algunos casos enriquecidas con una encantadora terraza privada, ideal para relajarse al aire libre y disfrutar de la tranquilidad en el corazón de Roma.